El archipiélago cubano, caprichosa agrupación de islas en el Mar Caribe, encierra una amplia variedad de tesoros naturales, reflejados en sus excelentes playas, abundante vegetación y una fauna con gran presencia de endemismo.
Historia, tradiciones y cultura se dan además la mano para impulsar el dinámico desarrollo de la industria del ocio, la cual atrae cada año a miles de visitantes de todos los continentes, interesados en conocer hasta los más pequeños detalles de la mayor de Las Antillas.
Kilómetros de costas arenosas, bañadas por cálidas y tranquilas aguas, se integran en una oferta única para los vacacionistas, con el complemento de la exquisita gastronomía cubana y la gama multicolor que ofrecen las numerosas frutas presentes en la isla.
Precisamente una verdadera fiesta multicolor brinda la naturaleza cubana, apoyada en el clima tropical que les otorga un olor peculiar y el sabor inconfundible que estimula a su consumo en cualquier momento del día.
Para aquellas que crecen en los suelos del país caribeño, esta el hecho de que su riqueza en vitaminas es superior a las que se obtienen en otras latitudes, unido a su abundancia pues maduran en diferentes momentos del año.
El lugar de honor por excelencia es para la piña, considerada por muchos como la reina de las frutas y la soberana de los campos de Cuba, cubierta con una piel áspera de color dorado que protege a un cuerpo jugoso y dulce.
Los entendidos recomiendan su consumo fresca o en jugos después de ingerir alimentos, para aprovechar así sus excelentes cualidades digestivas, además de estar presente en numerosos platos de la tradición culinaria cubana.
Desde Asia llegó a la tierra caribeña la naranja, para ocupar un lugar de primera línea en la dieta de los pobladores de la isla y sus visitantes, pues muchos escogen iniciar el día con un delicioso vaso de su zumo.
De forma natural, una de las variedades que esta en la preferencia de los consumidores es la fruta bomba -también llamada papaya en el oriente de la isla, agradable por su sabor dulce si se ingiere sin ningún aditivo, solo cortada en pequeños trozos o convertida en un delicioso jugo.
La India aportó a la agricultura cubana al mango, fruto considerado sagrado en el país asiático, y que en la mayor de Las Antillas se presenta en las más diversas formas y variedades con un denominador común, exquisitos para consumir en cualquier instante de la jornada diaria.
Entre las preferidas figura asimismo la banana, presente en jugos, batidos, alimentos para niños y como acompañamiento en las comidas, con propiedades que favorecen el crecimiento y desarrollo del sistema óseo.
Para el consumo diario, los especialistas recomiendan la guayaba, procedente de Centroamérica y caracterizada por su elevado contenido de vitamina C, sustancia que debe consumirse para satisfacer las necesidades del organismo.
Con toda esa oferta multicolor, los visitantes que apuestan por la isla tienen a su alcance no solo las opciones tradicionales, sino también una amplia gama de frutas para degustar y recordar así su estancia en el país caribeño.