La península de Guanahacabibes, en el extremo más occidental de la mayor de Las Antillas, se beneficia de los atractivos que encierran los mares que la rodean, convirtiéndola así en una plaza de enorme potencial para la náutica en Cuba.
Las cálidas aguas de la región, con fondos transparentes y repletos de los mas diversos tesoros -naturales y aportados involuntariamente por el hombre- están a disposición de los amantes del inmersionismo.
Asimismo, el frecuente paso de embarcaciones por las cercanías de las costas del territorio, convertido por la UNESCO en Reserva de la Biosfera desde 1987, aporta una inmejorable oportunidad para la creación de centros dedicados a la atención de los medios acuáticos.
La Marina Cabo de San Antonio, localizada en el sitio de igual nombre, figura como una de las opciones mas recientes que brinda la industria del ocio en la zona, como parte de la estrategia de ir mas allá de las tradicionales ofertas de sol y playa.
El centro, en franca expansión, brinda actualmente servicios de atracadero, suministro de combustibles, agua potable, energía eléctrica, custodios para la seguridad y protección de las naves y aprovisionamiento.
Asimismo, se localizan otras actividades necesarias para aquellos que prefieren la vía marítima para viajar, como son las comunicaciones internacionales, servicios de inmigración, aduana y capitanía de puerto, a lo cual se anade un snack bar.
La Marina Cabo San Antonio permite asimismo el alquiler de equipos de buceo, botes especializados para el inmersionismo, instructores dedicados a la práctica de esa actividad, unido a excursiones y la siempre atractiva pesca.
Entre los proyectos de desarrollo esta la construcción de cabañas para el hospedaje de los vacacionistas, con el complemento adicional de ubicarse en un entorno virgen, apenas tocado por la mano del hombre.
Dos decenas de sitios de buceo se integran a la oferta del centro, respaldados por una plataforma marina constituida de ecosistemas de arrecifes de coral, el más diverso entre los de tipo marino porque soporta gran cantidad de poblaciones de vertebrados e invertebrados.
Entre las caprichosas formas submarinas se localizan especies de alto valor económico, específicamente en Cabo Corrientes y Cabo de San Antonio, entre ellas pargos y chernas, aunque los inmersionistas también encuentran tesoros de otro tipo.
Existe igualmente en los fondos irregulares una alta población de coral negro, alrededor de 40 especies de corales pétreos, mezclados con crustáceos como la langosta y el cangrejo moro, además de moluscos del tipo del caracol reina y la cigua.
La actividad de corsarios y piratas, unido al peligro de épocas anteriores de navegar por aguas plagadas de arrecifes, aportaron a los fondos del lugar los mas variados restos de naufragios, algunos ocasionados por la naturaleza y otros llegados por la fuerza de la mano del hombre.