La mayor de Las Antillas, con una sólida presencia en el mercado del turismo internacional, incorpora nuevas facilidades para el ocio mas allá de destinos tradicionales como el balneario de Varadero o la propia capital cubana.
En esa dirección, el país se apoya en las excelentes oportunidades que brindan los numerosos islotes que se localizan por doquier, con condiciones únicas de naturaleza para el disfrute de los vacacionistas foráneos.
Cayo Largo del Sur, uno de esos peculiares sitios dedicado en exclusiva al ocio, cuenta con 24 kilómetros de excelentes playas y finas arenas, ubicado al sur de la isla y convertido en una de las apuestas del consorcio Barceló en Cuba.
El grupo español, uno de los más importantes del país ibérico, incorpora a este destino único para el ocio su propuesta de Beach Resort, de bien ganada fama gracias al balance favorable obtenido de su aplicación en hoteles de México, Nicaragua, Costa Rica y República Dominicana.
Al decir de expertos, la ubicación del establecimiento se apoya en excelentes playas y condiciones naturales para la realización de deportes acuáticos, unido a atractivos paisajes y fondos marinos que distinguen a la zona.
Precisamente, Cayo Largo del Sur esta considerado como uno de los mejores sitios para el inmersionismo, en un entorno de hermosos arrecifes coralinos en aguas poco profundas, donde habitan gorgonias, peces y variada flora.
Para los turistas están dispuestas las playas Sirena, con poco mas de dos kilómetros de extensión, Lindamar -curva como una concha-, Paraíso y Los Cocos, esta última llamada así por la existencia de árboles de ese fruto.
La oferta gastronómica del Barceló Cayo Largo Beach Resort se concentra en tres restaurantes, con servicios a la carta, tipo buffet y al grill, donde los vacacionistas podrán degustar las especialidades de la cocina cubana e internacional.
Con vistas al descanso, el establecimiento dispone de dos piscinas para adultos y una dedicada a los más pequeños, a lo cual se suma un centro de fitness, establecimientos comerciales, servicio médico, parqueo privado y salón de belleza.
Apoyado en la belleza de los mares que rodean al islote, los visitantes disponen de las facilidades necesarias para el buceo, a lo cual se añaden diversos programas de excursiones por los atractivos naturales de la zona.
La práctica del deporte también tiene su espacio en la nueva instalación, tanto las modalidades náuticas como de tierra, entre ellas canchas de tenis y voleibol.
Diseñado en consonancia con el entorno, el hotel dispone de 306 habitaciones, distribuidas entre un edificio principal y varias cabañas con bungalows, todas climatizadas y servicio de telefonía internacional.
El hotel está decorado con numerosas muestras pictóricas y artesanales creadas por afamados artistas locales, como parte de elementos que incorporan un toque de elegancia al centro turístico.