La provincia de Pinar del Río, en el extremo occidental, concentra en su geografía importantes riquezas naturales que la convierten en un sitio ideal para los amantes del entorno, con excelentes playas e islotes apenas tocados por la mano del hombre.
Precisamente, el territorio encierra en su alargada forma ofertas de la industria del ocio relacionadas al entorno, entre las cuales se incluyen franjas costeras y numerosos sitios para la práctica del inmersionismo.
En ese contexto, destaca en especial Cayo Levisa, en la costa norte del mencionado territorio y al cual se accede por mar desde el embarcadero de Palma Rubia, en una travesía que se extiende por unos 30 minutos.
Tres kilómetros de excelentes playas – localizadas caprichosamente en el medio del mar al estar ubicadas en el islote – y 23 sitios dedicados a la práctica del buceo convierten al lugar en una excelente plaza para los amantes del inmersionismo, gracias además a la transparencia de sus aguas y la existencia de una de las mayores barreras coralinas del mundo.
Asimismo, Pinar del Río cuenta con un proyecto que combina el desarrollo sostenible y el turismo en la zona de la comunidad montañosa de Las Terrazas.
Su importancia e interés se realza con su ubicación en la Sierra del Rosario, plaza fuerte de la naturaleza en Cuba y declarada en 1985 por la UNESCO como Reserva de la Biosfera.
El centro de la industria del ocio en ese territorio está en el Hotel Moka, levantado en el valle de San Juan al pie de la Loma del Salón, con un estilo que favorece el respeto a la flora, la cual a su vez contribuye a embellecer a este intimo inmueble de 26 habitaciones (25 estándares y una suite).
Otro de los sitios es el Valle de Viñales – Paisaje Cultural que figura como Patrimonio de la Humanidad – con grandes pilares de rocas de caprichosas formas nombrados mogotes.
Precisamente en una de esas formaciones peculiares que dominan con su altura el Valle de Viñales, conocida con el nombre de Dos Hermanas, los visitantes tropiezan con uno de los mayores murales de la prehistoria a cielo abierto del orbe.
Con 120 metros de alto y 180 de ancho en la ladera de la mencionada elevación, el Mural de la Prehistoria constituye una representación singular de la evolución biológica de la Sierra de los Organos, todo ello en la occidental provincia de Pinar del Río.
Otro de los puntos de interés para los vacacionistas está en los sistemas cavernarios localizados en el territorio, los mayores del país, entre los cuales destaca la cueva de Santo Tomás, con una longitud de 45 kilómetros que la convierten además en la tercera de América Latina.
Para muchos entendidos, el hecho de haber comenzado la colonización del archipiélago cubano por el oriente del país dejó a este territorio como una de las últimas opciones para los españoles, lo cual le ha permitido conservar hasta nuestros días una flora y fauna endémicas en su mayor parte.
La huella de los primeros pobladores de Cuba se encuentra en la península de Guanahacabibes, el extremo más occidental de la isla, y llamada así por las tribus que antaño se asentaron en esa zona, hoy convertida en reserva de la biosfera y refugio seguro para las más variadas especies de animales.
Más cerca de la capital, Soroa – conocida también como el arcoiris de Cuba – presenta una imagen única con un hermoso salto de agua de 22 metros de altura que constituye una invitación a refrescar en cualquier época del año.
Pero el más conocido atractivo de ese sitio está en el orquideario, punto obligado para todos los turistas que visitan la provincia, con especies de esas flores procedentes de todas partes del mundo.