El archipiélago cubano, plaza fuerte para el turismo en el área del Caribe, apoya su estrategia de expansión en la industria del ocio en una sólida y tradicional oferta de sol y playa, avalada por numerosos atractivos naturales.
Centenares de kilómetros de excelentes playas y blancas arenas distribuidas en toda la geografía del país se mezclan con opciones únicas que permiten a los vacacionistas el estrecho contacto con el entorno.
En ese escenario, las zonas del occidente y centro de la isla concentran un enorme potencial en la materia, donde la provincia de Pinar del Río encierra sitios como Las Terrazas, proyecto que combina el desarrollo sostenible y el turismo.
Otro de los sitios es el Valle de Viñales – Paisaje Cultural que figura como Patrimonio de la Humanidad – con grandes pilares de rocas de caprichosas formas nombrados mogotes.
Asimismo, en el territorio se localizan los mayores sistemas cavernarios del país, entre los cuales destaca la cueva de Santo Tomás, con una longitud de 45 kilómetros que la convierten además en la tercera de América Latina.
La huella de los primeros pobladores de Cuba se encuentra en la península de Guanahacabibes, el extremo más occidental de la isla, y llamada así por las tribus que antaño se asentaron en esa zona, hoy convertida en reserva de la biosfera y refugio seguro para las más variadas especies de animales.
Mientras, en Matanzas se encuentra la Ciénaga de Zapata, paraíso por excelencia para los amantes de la ecología y que otorga refugio al 30 por ciento de la fauna autóctona de la mayor de Las Antillas.
Entre las especies destacan 171 de aves, de las cuales 18 son endémicas del territorio, convertido en una de las zonas más ricas de la isla para el turismo ecológico.
Completan los atractivos las Salinas de Bidos, donde en invierno los naturalistas pueden observar hasta 165 especies de aves, además de la Cueva de los Peces, la mayor inundada del archipiélago, sitio ideal para el espeleobuceo.
A su vez, en la zona central las provincias de Villa Clara, Cienfuegos y Sancti Spíritus cuentan con un enorme potencial para la práctica del turismo de naturaleza, unido a decenas de kilómetros de excelentes playas.
En esa modalidad se destaca en Villa Clara el lago Hanabanilla, único con características intramontanas del país y alimentado por tres afluentes (ríos Negro, Hanabanilla y Guanayara), plaza ideal para los amantes de la naturaleza.
Otro de los sitios que combinan la opción de naturaleza y salud es Topes de Collantes, ubicado a 800 metros sobre el nivel del mar, y que con sus 110 kilómetros cuadrados constituye el reservorio de numerosas especies endémicas de la flora y la fauna nacionales.
Al sur de la ciudad de Santa Clara, capital de la provincia, se encuentra el Area Protegida Cubanacán, verdadero paraíso natural y refugio de anfibios, reptiles, mamíferos y aves, donde destacan 10 especies que conforman la lista de grupos endémicos del país.