El archipiélago cubano, reconocido a nivel mundial por las características únicas de sus playas, tiene además componentes que respaldan la posición del país en el escenario turístico del Caribe.
Con una ubicación geográfica privilegiada, tradiciones que superan los cinco siglos y una naturaleza en perfecto estado de conservación, la isla sustenta además su potencial en la riqueza histórica acumulada.
Numerosos monumentos y museos forman parte de la propuesta cultural de Cuba, donde se incluye como elemento de prioridad la figura del Héroe Nacional José Martí.
Una estatua del Apóstol de gran tamaño figura como testigo mudo de los acontecimientos ocurridos en una enorme explanada al frente, habitual punto de concentración de los cubanos.
Precisamente en la base de esa escultura se ubica el recinto del Memorial, guardián de numerosos exponentes vinculados a la vida y obra del destacado intelectual.
Los recorridos por el Memorial, con 15 años de funcionamiento, constituyen una oferta de gran demanda en los programas de ocio vinculados a la cultura e historia que brindan las numerosas agencias de viajes y turoperadores que funcionan en la ciudad.
Personal especializado recibe a los turistas para un recorrido donde pueden conocer no solo a la personalidad de Martí, sino también aspectos relacionados con la construcción del conjunto monumentario, la plaza y sus edificaciones cercanas.
En la base del monumento, con la forma de las cinco puntas de una estrella, salas de exposiciones y de actos esperan por la llegada de los visitantes, con un programa que incluye también conferencias, presentaciones de libros y conciertos de pequeño formato.
Varios de los salones muestran aspectos de la personalidad del Héroe Nacional cubano, estrechamente vinculado a la gesta independentista de la isla, mediante grabados, dibujos, iconografía, ediciones de sus obras y objetos significativos en la vida del Apóstol.
Entre esas reliquias a la vista de los visitantes están los títulos de licenciado en Filosofía y Letras y Derecho del joven luchador, extendidos por la Universidad española de Zaragoza.
Particular interés despierta entre aquellos que acceden al recinto un mural de cerámica veneciana creado por el artista plástico cubano Enrique Carabia, donde prevalece el verde con 89 textos martianos en letras laminadas en oro de 10 quilates.
El cierre del recorrido también es espectacular, con el ascenso al Mirador del Monumento, localizado a 139 metros sobre el nivel del mar y considerado por los especialistas como el punto más alto de la ciudad.
Desde ese sitio se abre una visión panorámica de la centenaria urbe, con su mezcla de estilos arquitectónicos, culturas, tradiciones y razas, todo ello en una oferta única capaz de impactar para siempre en la memoria de los miles de vacacionistas que apuestan por el ocio en la isla caribeña.