La capital cubana, principal destino para el turismo en la mayor de Las Antillas, se erige en todo el esplendor de sus tradiciones, cultura e historia como una opción segura dirigida a vacacionistas foráneos y nacionales.
Como elemento a destacar, en su centro histórico se localizan numerosos museos, iglesias, centros culturales e inmuebles muy vinculados a la época de la colonia, con unas 33 mil edificaciones construidas en su mayoría durante los siglos XVIII y XIX.
Otrora villa de San Cristóbal de La Habana, representa en la actualidad un singular exponente de los más diversos estilos constructivos, reflejo de las etapas de desarrollo por las cuales atravesó la histórica urbe.
Su sistema de fortalezas, con el emblemático Castillo de Los Tres Reyes del Morro, abarcó nueve grandes construcciones para constituir –a decir de los expertos– el conjunto más notable de su tipo en la América hispana.
Asimismo, uno de los escenarios marcados por la estrecha relación entre el escenario urbano y el mar está precisamente en Ciudad de La Habana.
En esa dirección destaca el caso del Malecón, donde las olas rompen a lo largo del espigón de esa vía, una de las principales arterias de la capital cubana.
El atractivo vial se extiende desde la entrada de la Bahía de La Habana –al este–, por espacio de unos cinco kilómetros hacia el poniente, con un caprichoso diseño en paralelo a la irregular línea costera, bañada por las cálidas aguas que rodean a la isla.
El principal núcleo urbano de Cuba acoge a verdaderos colosos del turismo como el Hotel Meliá Cohíba y el Nacional, este último declarado en 1982 Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
El Nacional clasifica además entre los 10 Hoteles Palacio del planeta y de los años 30 a los 50 fue la única instalación con categoría de cinco estrellas en la región del Caribe.
También cuenta con el Hotel Habana Riviera, con 350 habitaciones y todas las facilidades necesarias para el descanso, complementadas con el legendario cabaret Copa Room.
Cabe destacar que el país fomenta los programas de turismo urbano, para lo cual la isla se apoya en la herencia colonial que se encuentra por doquier en sus ciudades.
La capital es también escenario ideal para una amplia gama de eventos que incluyen la cultura, como son los festivales del cine latinoamericano y ballet, además de la feria internacional del libro con carácter anual.
Unido a ello, La Habana tiene en la cercanía el aporte de sol y mar del denominado Circuito Azul, con playas como Santa María del Mar, Bacuranao y Guanabo.
Las ofertas de descanso se completan con opciones como las del Acuario Nacional de Cuba, el Zoológico Nacional y los museos más representativos del país.