Los atractivos turísticos de la mayor de Las Antillas, representados en propuestas tradicionales de sol y playa, cultura y tradiciones, encuentran también espacio en los islotes y cayos que conforman el archipiélago cubano.
En el caso de la región occidental, la provincia de Pinar del Río concentra una amplia gama de opciones, entre las cuales destacan las ofertas de Cayo Levisa, en la costa norte del mencionado territorio e integrado en el archipiélago de Los Colorados.
Tres kilómetros de excelentes playas y 23 sitios dedicados a la práctica del buceo se integran en las alternativas del referido islote, al cual se accede por mar desde el embarcadero de Palma Rubia, en una travesía que se extiende por unos 30 minutos.
Los programas de inmersionismo se sustentan en la existencia de una de las mayores barreras coralinas del mundo, con cerca de 500 especies de peces, 200 de esponjas y variedades de moluscos crustáceos, gorgonias y otros animales marinos.
Además, en profundidades que oscilan de tres a 40 metros se localizan estructuras de coral de estrellas y coral cerebro, abanicos de mar, gorgonias plumosas y numerosos peces como loros, barberos, roncos, chapas, chernas, pargos criollos y crustáceos.
De manera adicional, en la región se añade la presencia de trigonias, consideradas los fósiles vivientes más antiguos de la mayor de las Antillas, unido a pecios del siglo XVII y XVIII, todos accesibles y de interés arqueológico.
La actividad de buceo cuenta con el respaldo de expertos con categoría internacional de Monitoreo de Arrecife y que aportan la seguridad necesaria.
Por otra parte, el islote sirve de sede a la organización de cursos para expertos de inmersión procedentes de diversas partes del mundo, con el consiguiente impacto promocional en los atractivos del lugar para la industria del ocio.
Asimismo, en la cercanía se localiza cayo Mégano de Casigua, otrora habitual refugio del escritor estadounidense Ernest Hemingway, quien lo bautizó con el nombre de Paraíso.
Los atractivos principales de ese último territorio se concentran en una excelente playa de alrededor de 500 metros de largo, magníficos fondos para la práctica del buceo, aislamiento y tranquilidad total.
Su historia se relaciona con el desaparecido novelista Premio Nobel de Literatura, quien solía visitarlo y pasar largas jornadas en el lugar.
También en el archipiélago de Los Colorados esta Cayo Jutia, fácil de acceder a través de una vía de cinco kilómetros sobre el mar y con una zona de playa de cinco mil metros de extensión.
De esa forma, la industria cubana del ocio incorpora a sus ofertas sitios apenas tocados por la mano del hombre y que encierran una riqueza natural inigualable, con lo cual el turismo suma elementos para diversificar las opciones recreativas.
Sin dudas, Levisa hace honor a la tradición de la provincia para la modalidad de naturaleza, la cual gana cada vez más espacios en la preferencia de los vacacionistas.