Las tradicionales ofertas de sol y playa en el archipiélago cubano tiene como elemento a destacar al balneario de Varadero, en la occidental provincia de Matanzas.

Su privilegiada ubicación geográfica de la isla, en una zona de aguas transparentes y cálidas, unido a la existencia de extensas franjas de arena, constituyen un complemento de peso a esa modalidad, en especial para la época de verano.

Sin dudas, la calidad del balneario lo lleva a aspirar a la condición de Mejor Playa del Mundo en 2020, en un proceso que requiere del respaldo de todos para la limpieza de las calles y áreas verdes.

Para ello, se propone colocar la basura en depósitos como cestos, bolsas y contenedores, utilizar las áreas destinadas a parqueos para vehículos y transitar a pie por los accesos a la playa.

También retirar restos de alimentos y los envases utilizados, eliminar las colillas de cigarro en la arena, cuidar y mantener limpio el entorno, y evitar dañar o cortar cualquier especie de planta en la duna.

Con dos decenas de kilómetros de excelentes playas, dispone de 52 instalaciones hoteleras, de ellas el 83 por ciento bajo gestión de cadenas extranjeras.

En efecto, en el escenario de Varadero se dan la mano compañías de primera línea como las españolas Meliá, Iberostar y Globalia, o la canadiense Blue Diamond.

Asimismo, se trabaja en un parque temático como parte de las acciones para mejorar las ofertas destinadas a los vacacionistas, tanto nacionales como extranjeros.

Si bien opera solo un campo de golf de 18 hoyos, los planes contemplan otras tres facilidades de ese tipo, la primera de ellas en construcción a partir del 2020.

Unido a ello, de manera periódica se realizan vertimientos de arena con vistas a mantener la franja de playa y el más reciente proyecto en esa dirección se concentrara en los seis sectores más importantes del balneario.

Un total de 1,5 millones de metros cúbicos de arena se colocaran en una primera fase.

Los fondos marinos de Varadero poseen más de 40 tipos de corales, diversidad de peces, langostas, camarones, cangrejos, tortugas y más de 70 tipos de moluscos.

Asimismo, marinas como Chapelin, Dársena de Varadero y Gaviota garantizan las condiciones y medios para la práctica del submarinismo, con embarcaciones apropiadas, personal preparado, centros de enseñanza de buceo, cámaras hiperbáricas y el transporte necesario para cualquier emergencia.

Mientras, el inmersionismo tiene su plato fuerte en el llamado Hoyo Azul Ojo del Mégano, una enorme caverna de 70 metros de diámetro, donde prevalecen los paredones sumergidos, barreras de corales y enormes bancos de peces multicolores.

La naturaleza muestra con orgullo las más de 300 hectáreas de Punta de Hicacos, con las pictografías aborígenes de la Cueva de Ambrosio y las ruinas de la Salina La Calavera, considerada la primera en explotarse en América por los españoles en la etapa de la colonización.

Entre los atractivos de Varadero resalta la casa del ron, donde existe parte de la huella y la historia de las bebidas originarias de la isla.