La agenda turística de la mayor de Las Antillas, avalada por un amplio espectro de opciones recreativas, se apoya en la riqueza natural para la promoción de programas vinculados al senderismo y el ecoturismo.
Las propuestas están por doquier, de Occidente al Oriente, tomando en cuenta un bien cuidado entorno y el interés por el desarrollo sostenible de la industria del ocio.
Para avalar la estrategia en la materia, cabe mencionar que el país dispone de 14 parques nacionales, 25 reservas ecológicas y seis de la biosfera
Cuba se apoya además en una fauna que cuenta con unas 16 mil 500 especies descritas y donde algunos grupos zoológicos muestran un endemismo superior al 90 por ciento, acompañada de una flora autóctona con más de seis mil 300 variedades.
Reservas naturales, de la biosfera, paisajes naturales y áreas protegidas conforman una extensa red de ofertas, marcada por su riqueza, excelente conservación y características únicas que la distinguen en la región.
Los visitantes que optan por esa modalidad pueden avistar gran variedad de aves, puesto que Cuba posee la mayor diversidad de todas Las Antillas, o visitar criaderos de especies en peligro de extinción como el del cocodrilo.
También pueden realizar cabalgatas a través de sus valles, participar en los programas de cicloturismo, conocer fincas campesinas que permiten interactuar con lo más genuino de las raíces cubanas y realizar la actividad de la pesca deportiva.
Otro de los atractivos del ecoturismo de Cuba son las visitas a las cuevas dispersas por toda la isla, entre las que destacan la Cueva Ambrosio, las de Bellamar, del Indio, la Gran Caverna de San Tomás o el sendero arqueológico natural El Guafe.
En el extremo más occidental se localiza la Península de Guanahacabibes, uno de los más importantes corredores de aves migratorias, y una peculiar arquitectura formada por la erosión provocada por el mar.
También destaca el Valle de Viñales, declarado por la UNESCO Paisaje Cultural de la Humanidad, con estructuras rocosas denominadas mogotes, consideradas entre las más antiguas del país, con fósiles de reptiles marinos, moluscos y peces del período Jurásico.
Mientras, en Villa Clara destaca el lago Hanabanilla, único con características intramontanas del país y alimentado por tres afluentes (ríos Negro, Hanabanilla y Guanayara), plaza ideal para los amantes de la naturaleza.
El mencionado reservorio cuenta con un espejo de agua de 14,9 kilómetros cuadrados, y entre 30 y 40 metros de profundidad como promedio, con una altitud sobre el nivel del mar de 364 metros y un potencial de almacenamiento en torno a los 300 millones de metros cúbicos.
Hacia el oriente figura el Parque Nacional Turquino, con las montañas más altas de la isla, entre ellas los picos Real del Turquino con mil 974 metros, el Cuba con mil 872 metros y el Suecia con mil 734 metros.
En el caso del parque nacional Desembarco del Granma, en el oriente de la isla, resalta el hecho de ser el segundo y más conservado exponente mundial de los sistemas de terrazas marinas.