La ciudad de Holguín, capital de la oriental provincia cubana de igual nombre, se acerca a los tres siglos de su fundación con un amplio espectro de oportunidades para los amantes del turismo en todas sus modalidades.
En el marco de la celebración, prevista en el 2020, la urbe exhibe con satisfacción una mezcla de arquitectura española, con casas tipo chalet del estilo americano, barrios periféricos apegados a lo tradicional y una cultura con un carácter verdaderamente iberoamericano.
Conocida también como la "ciudad de los parques" por la gran cantidad de estos sitios, figura como importante centro de las artes plásticas cubanas, además de otras manifestaciones culturales como la música sinfónica, el ballet y el teatro lírico.
El surgimiento de la ciudad de San Isidoro de Holguín, capital de la provincia, está vinculado a la figura de Don Francisco García de Holguín, quien fundó junto a su esposa el primer caserío hacia el año de 1545.
Dos siglos después, Holguín se convierte en la cuarta ciudad del país en obtener esta condición, pues contaba en esa época con más de mil 200 habitantes y unas 200 casas de rústica construcción, además de una escuela pública.
Ya hacia 1863, el territorio dispone de hasta 76 ingenios dedicados a la producción de azúcar, unas 750 vegas de tabacos y cientos de fincas rústicas atendidas por dotaciones de esclavos en una clara señal de desarrollo.
En su geografía esta Bariay, punto donde tocó tierra cubana el almirante Cristóbal Colón en su búsqueda de una nueva ruta a Las Indias, y el magnífico entorno natural -con playas vírgenes y una vegetación exuberante- llevó a sus labios el calificativo de "La tierra más hermosa que ojos humanos han visto".
También en la provincia se localizan hasta 14 ciudades importantes, entre las cuales se destacan Banes -considerada la capital arqueológica de Cuba- y Gibara, esta última doblemente atractiva por el excelente estado de conservación de su arquitectura colonial ibérica.
Con uno de los principales puertos del oriente cubano para el comercio de esclavos y azúcar desde el siglo XVIII (Gibara), Holguín encierra asimismo las ruinas de las fortificaciones españolas que protegieron a sus ciudades del asedio de piratas y corsarios, atraídos por las riquezas de la colonia.
Varios cayos dedicados al turismo, parques naturales y centros de opciones extrahoteleras completan la oferta de Holguín para la dinámica industria del ocio en la provincia, muy visitada por miles de vacacionistas cada año.
Cuatro decenas de excelentes playas naturales están a disposición de los amantes de los baños de mar, en una relación donde figuran sitios como Guardalavaca, Estero Ciego, Esmeralda y Don Lino, por solo citar algunos de ellos.
Para los amantes del ecoturismo resaltan los atractivos singulares de las zonas cercanas a Sierra Cristal, donde se localizan exponentes únicos de la flora cubana como palmas, cocoteros, frutas tropicales, helechos y árboles de maderas preciosas.