La actividad tur?stica en el archipi?lago cubano, sustentada por la existencia de una amplia oferta de propuestas de naturaleza, historia y tradiciones, se apoya tambi?n en la riqueza cultural de la isla y la extensa red de instituciones vinculadas al patrimonio. Decenas de kil?metros de excelentes playas, instalaciones hoteleras de primer nivel y facilidades para la recreaci?n tienen como complemento a los diversos programas de turismo cultural que adelanta la mayor de Las Antillas. Precisamente, ese componente es considerado como un elemento fundamental en la estrategia de desarrollo de la industria del ocio, en especial con la trayectoria de Cuba en esa esfera. Festivales y ferias de diversos g?neros art?sticos ? que van desde la m?sica hasta el cine y la literatura ? destacan entre las ofertas para los vacacionistas. Las salas del s?ptimo arte en la capital y hacia el interior del pa?s acogen cada a?o las novedades cinematogr?ficas elaboradas en Am?rica Latina, en el marco del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, consolidado ya como una de las ofertas m?s atractivas de esa industria. Tambi?n destacan eventos como la Feria Internacional del Libro (con car?cter anual), espect?culos de la danza, teatro y ballet, adem?s de festividades propias de localidades como los carnavales, en cada uno de los sitios con sus caracter?sticas ?nicas. El patrimonio hist?rico de la isla, acumulado durante siglos, tambi?n encuentra refugio seguro en una amplia red de museos que se extiende por todo el pa?s para preservar el legado procedente de ?pocas pasadas. El mencionado esquema incluye cerca de 300 instalaciones de los m?s variados dise?os y contenido, de las cuales 14 clasifican como museos de arte, siete de ciencias y tecnolog?a, cinco de etnograf?a y antropolog?a y 68 de historia. Otros nueve se consideran especializados, 164 generales y cuatro de arqueolog?a, todos ellos con un objetivo com?n: trasladar las ense?anzas de anta?o a la nueva realidad. Uno de los m?s reconocidos es el de Bellas Artes, distribuido en un conjunto de tres inmuebles con unas 47 mil 600 obras que conforman el preciado tesoro del centro, de ellas 45 mil calificadas como patrimonio nacional y poco m?s de dos mil conservadas en calidad de dep?sito. Tambi?n el pa?s suma a sus atracciones las denominadas maravillas de la ingenier?a civil cubana, seleccionadas de un total de 37 propuestas y con la primera de ellas originada en el siglo XIX. Ese honor correspondi? al acueducto dise?ado por Francisco de Albear, que comenz? a prestar servicios en 1893 y todav?a en la actualidad suministra una parte l?quido que consume la capital cubana. Autos antiguos, mudos testigos de siglos ya pasados, se suman a recorridos por la historia de productos tradicionales de la isla, el ron y el tabaco entre ellos, todo mezclado en una combinaci?n para dar respuesta a la curiosidad de los turistas.

La actividad tur?stica en el archipi?lago cubano, sustentada por la existencia de una amplia oferta de propuestas de naturaleza, historia y tradiciones, se apoya tambi?n en la riqueza cultural de la isla y la extensa red de instituciones vinculadas al patrimonio. Decenas de kil?metros de excelentes playas, instalaciones hoteleras de primer nivel y facilidades para la recreaci?n tienen como complemento a los diversos programas de turismo cultural que adelanta la mayor de Las Antillas. Precisamente, ese componente es considerado como un elemento fundamental en la estrategia de desarrollo de la industria del ocio, en especial con la trayectoria de Cuba en esa esfera. Festivales y ferias de diversos g?neros art?sticos ? que van desde la m?sica hasta el cine y la literatura ? destacan entre las ofertas para los vacacionistas. Las salas del s?ptimo arte en la capital y hacia el interior del pa?s acogen cada a?o las novedades cinematogr?ficas elaboradas en Am?rica Latina, en el marco del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, consolidado ya como una de las ofertas m?s atractivas de esa industria. Tambi?n destacan eventos como la Feria Internacional del Libro (con car?cter anual), espect?culos de la danza, teatro y ballet, adem?s de festividades propias de localidades como los carnavales, en cada uno de los sitios con sus caracter?sticas ?nicas. El patrimonio hist?rico de la isla, acumulado durante siglos, tambi?n encuentra refugio seguro en una amplia red de museos que se extiende por todo el pa?s para preservar el legado procedente de ?pocas pasadas. El mencionado esquema incluye cerca de 300 instalaciones de los m?s variados dise?os y contenido, de las cuales 14 clasifican como museos de arte, siete de ciencias y tecnolog?a, cinco de etnograf?a y antropolog?a y 68 de historia. Otros nueve se consideran especializados, 164 generales y cuatro de arqueolog?a, todos ellos con un objetivo com?n: trasladar las ense?anzas de anta?o a la nueva realidad. Uno de los m?s reconocidos es el de Bellas Artes, distribuido en un conjunto de tres inmuebles con unas 47 mil 600 obras que conforman el preciado tesoro del centro, de ellas 45 mil calificadas como patrimonio nacional y poco m?s de dos mil conservadas en calidad de dep?sito. Tambi?n el pa?s suma a sus atracciones las denominadas maravillas de la ingenier?a civil cubana, seleccionadas de un total de 37 propuestas y con la primera de ellas originada en el siglo XIX. Ese honor correspondi? al acueducto dise?ado por Francisco de Albear, que comenz? a prestar servicios en 1893 y todav?a en la actualidad suministra una parte l?quido que consume la capital cubana. Autos antiguos, mudos testigos de siglos ya pasados, se suman a recorridos por la historia de productos tradicionales de la isla, el ron y el tabaco entre ellos, todo mezclado en una combinaci?n para dar respuesta a la curiosidad de los turistas.